La centroderecha
chilena debe rearticularse alrededor de las ideas que ha defendido siempre, pero
insertándose en el siglo 21. Necesita una misión que convoque e ilusione a
todos, con un objetivo que genere entusiasmo porque realmente beneficia a todos.
Traer a Chile los beneficios del siglo
21, que será un siglo digital, es
el mejor objetivo que puede poner. La Sociedad que nos trae Internet incorpora principios
que tradicionalmente ha defendido de la centroderecha, como libertad e
iniciativa individual, meritocracia, igualdad de oportunidades, o rol
subsidiario del Estado.
Internet - junto con
otras tecnologías disruptivas - está cambiando la sociedad civil, la economía y
la política, tanto o más como en su día cambió al mundo la revolución
industrial y el capitalismo. Estamos pasando desde una Sociedad Industrial, cuya economía está basada en el
capital financiero, a una Sociedad Digital, cuya economía está basada en el
capital intelectual. El foco de las naciones será el descubrimiento y
desarrollo de los talentos personales para que, como resultado, las personas trabajen
en aquello en lo que tienen más talento y más les gusta. Como consecuencia, habrá
una creación de bienestar muy superior al actual, junto a una mayor cohesión y
justicia social. Internet genera un ecosistema que facilita que esto suceda.
Si la centroderecha pone su
foco en la incorporación plena de Chile al siglo 21, sus principios serán automáticamente defendidos,
cambiando de una vez por todas el eje de la política desde el pasado hacia el
futuro, superando esta sociedad aún bipolarizada alrededor de la lógica del sí
y el no.
Los talentos no
desarrollados de los chilenos son el peor despilfarro de recursos que tenemos,
y traen mucha frustración a mucha gente. El cobre no es renovable. Los
talentos, si. El cobre no nos ha dado ni nos dará mayor igualdad de
oportunidades, ni mayor cohesión social, ni una mejor sociedad. Los talentos,
sí. Los problemas de fondo de Chile no se resolverán con mayor Estado ni con
mayor mercado, sino con mayor talento, y con un país enfocado a que todas las
personas puedan descubrir y desarrollar los suyos. El crecimiento económico del
siglo 21 viene de la mano del desarrollo del capital intelectual, y solo el
capital intelectual puede darle verdaderas oportunidades de promoción social a
quien no las tiene. Es el camino corto hacia un verdadero desarrollo.
Sin un Desarrollo Digital
para Chile, nos quedaremos en la trampa del ingreso medio, con una sociedad que
exige cada vez más y un Estado que debe crecer cada vez más para intentar
entregar lo que se exige. Seremos un país que se queda en la explotación de
recursos naturales y no crea buenos puestos de trabajo.
En el Siglo
21, “being right is being right”. Las
ideas correctas (being right, en el sentido de “estar en lo correcto”) vendrán
de ideas que siempre ha defendido la centroderecha (being right, en el sentido
de “ser de derecha”), pero solo en la
medida en que ésta trabaje por la Sociedad donde dichas ideas funcionan de
verdad para entregar a todos mejores oportunidades y
calidad de vida. De lo contrario, Chile seguirá votando por la centroizquierda,
porque se mantendrán las ineficiencias de un modelo social y económico
fracasado en su promesa de llegar a todos, y que necesita del Estado como
“elemento balanceador”.
Alfredo Barriga
Enero de 2015
2 comentarios:
Le estás dando el dato a la centro-izquierda...
Fuera de bromas, buen análisis.
Carlos, en parte de eso se trata. A ver qué caracteristica de Internet se toma la centro izquierda para decir "yo también". Y de ahí... es como dice Parra, "la izquierda y la derecha unida jamas seran vencidas".
Pero con OTRO eje de discusion, más de futuro. Si seguimos como vamos, no va a quedar Chile para el 2025. Y lo digo en serio
Un abrazo.
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