Este martes la Fundación País Digital llevó a cabo un
desayuno de trabajo para analizar los resultados de la primera prueba SIMCE de
TIC llevada a cabo en Chile el 30 de noviembre de 2011.
Lo primero y más positivo es que se haya realizado esta encuesta
sobre el uso de TIC por parte de escolares tanto del sector público como
privado y subvencionado. Esta fue tomada
por 10.321 estudiantes de 2° Medio, distribuidos entre 505 establecimientos a
lo largo del país.
La prueba mide el nivel de desarrollo de las Habilidades TIC
para el Aprendizaje que han alcanzado dichos estudiantes. Estas habilidades
incluyen el manejo de las herramientas tecnológicas a disposición, sumado a la
aptitud para enfrentar y resolver problemas de alta complejidad cognitiva,
interactuar con otros y desenvolverse de forma ética y ajustada al marco legal
dentro de ambientes tecnológicos, lo que se expresa en la capacidad de los
estudiantes para resolver problemas y tareas escolares reales en un ambiente
virtual, a través del uso de aplicaciones computacionales regularmente
utilizadas.
Los resultados de la prueba se midieron sobre la base de un
puntaje, dividiéndose el mismo en tres categorías: básico (245 puntos o menos),
intermedio (entre 246 y 335 puntos) y avanzado (más de 335 puntos).
Quienes estamos al tanto de la realidad chilena en el uso de
TIC esperábamos resultados bajos con desigualdades altas. Lo que no esperábamos
era la magnitud de las diferencias.
Efectivamente, el porcentaje de alumnos que alcanzaron nivel
avanzado en el segmento socioeconómico alto es 56 veces superior al mismo
porcentaje en el segmento socioeconómico bajo (16,9% vs 0,3%). La misma
comparación entre colegios privados y colegios públicos de de 30 veces más en
los primeros que en los segundos (18,2% vs 0,6%).
El promedio de puntaje es bastante parecido en todas las
regiones, aunque la Región Metropolitana junto con la V sobresale un poco
respecto a las demás (una pista: tienen mayor cobertura de banda ancha).
Me llamó la atención el porcentaje de alumnos que
consiguieron el nivel avanzado en colegios privados. Aquí es donde, en teoría,
se educa la elite de Chile. Hubiera esperado un porcentaje más alto de alumnos
en esta categoría. El 18,2% obtenido resalta aún más la gravedad de las
diferencias con las clases menos acomodadas. Es decir, las clases más
acomodadas están con un bajo porcentaje en nivel avanzado, y sin embargo,
tienen 56 veces más que las clases más bajas.
A grandes problemas, grandes soluciones. Chile necesita un
proyecto como el que se impulsó en Portugal o en Uruguay, entregando un
computador por alumno y con conexión a Internet. Lo que no haría sería
entregarlos, sin más. Sería un derecho para los alumnos siempre y cuando el
colegio (público o particular subvencionado) tenga un proyecto de incorporación
de TIC en el aula, basado en alguno de los muchos nuevos paradigmas que han
surgido y
que he comentado en otro artículo, con aprobación del Ministerio de
Educación.
De esta forma, los alumnos y sus padres y apoderados
presionarán a los directores y profesores de colegio para que se adopte un
proyecto que les permita acceder a un computador, pero con un propósito
educativo detrás. Ese proyecto debería incluir entrega de un PC a los
profesores y la correspondiente capacitación para introducir TIC en el aula, en
especial para llevar a cabo trabajos de investigación en grupo. Se puede
comenzar con un curso, para posteriormente ampliar a todo el colegio. Lo
importante es que quede claro que se va a avanzar por esa carretera sí o sí, y
que serán los propios alumnos y sus apoderados quienes exigirán recibir las
mismas
En el desayuno de trabajo el Director de Enlaces mostró una
diapositiva de las habilidades que necesitarán los trabajadores para el año2020. De la lectura de esa lista queda diametralmente claro que el uso de TIC
es una herramienta indispensable para que nuestros ciudadanos tengan acceso a
los puestos de trabajo que se estarán creando. Lo inverso también es cierto: si
no cuentan con un manejo avanzado de TIC
estarán discapacitados para trabajar, y Chile no contará con mano de obra
cualificada para las necesidades y desafíos que deberá enfrentar. El año 2020,
en términos de educación, es ahora
mismo. Esperemos, por el bien de Chile, que este tema esté entre las 5
prioridades del Ministro de Educación.
Alfredo Barriga